Es Tiempo Para Un Recorte: Comienza Enero Con Poder
- Janelle Taveras
- 17 ene
- 5 Min. de lectura
Actualizado: 4 jun
Enero debería ser el mes del año en el que se solucionen los problemas. Debe ser un momento para descubrir lo que funciona para ti y entrar en un buen ritmo. Parte de nuestro fracaso es que queremos saltar a la ejecución perfecta y pasar de 0 a 100 de una sola vez. En este blog, quiero dar una palabra de aliento e instrucción para ayudar a establecer su enero y el resto de 2025. No te desanimes, sigue intentándolo, la solución que buscas suele ser más sencilla de lo que crees. Tu solución o avance puede estar a la vista, pero aún no le has prestado atención, que el Señor use este mensaje para abrir tus ojos para ver la nueva visión, oídos para escuchar las nuevas instrucciones y un corazón para obedecer inmediatamente.
Título este mensaje "Es tiempo para un recorte". Vayamos al libro de Génesis cuando Abraham, que era Abram en ese entonces, se dio cuenta de que ya no podía vivir con su sobrino Lot. Abram sintió que tenía la responsabilidad de cuidar de Lot porque el padre de Lot había fallecido, pero ya no había suficiente espacio para que vivieran juntos. Los pastores de los rebaños de Abram y Lot comenzaron a quejarse, ya que parecía haber competencia por los recursos y la discordia estaba aumentando entre estos parientes. Abram, siendo el mayor y el más sabio de los dos, dijo en el versículo 8: "Que no haya contienda entre nuestros pastores, porque somos familia". Abram incluso le dio a Lot la primera opción de preferencia en cuanto a dónde quería ir y tomar sus posesiones. Abram escogió la paz en lugar de tener la razón.
Algunos de nosotros estamos teniendo discusiones con nuestros amigos cercanos y familiares o tal vez nos falta paz en nuestros hogares porque no estamos de acuerdo. Es hora de un corte y posiblemente de separarnos de nuestros seres queridos en esta próxima temporada a la que Dios quiere llevarte. Lo más probable es que seas el maduro en la relación (esto puede no tener que ver con la edad), y depende de ti dejar ir las discusiones por el bien de la paz. Incluso si tú tienes razón y ellos están equivocados, elige la paz en lugar de conflictos y disputas, como lo hizo Abraham. Hebreos 12:14 dice: "Busquen la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor." A veces nos acostumbramos a lidiar con la disfunción y comenzamos a pensar que es normal o simplemente preferimos mantener las cosas como están, pero esto es una falsa paz y Dios está diciendo "Es tiempo para un recorte". Debemos obedecer a Dios sin importar cuán dura pueda ser la separación, o cuán difíciles sean los cambios que tengamos que hacer, pero tenemos que dejar ir.
La separación entre Abram y Lot era necesaria porque podemos ver que Lot no tenía discernimiento, lo que podría haber terminado siendo una piedra de tropiezo para Abram en el futuro. Podemos ver esto porque Lot eligió establecerse en Sodoma (versículo 13) donde se sabía que los hombres de Sodoma eran malvados y grandes pecadores contra el Señor, pero todo lo que Lot podía ver era "prosperidad". Ahora, mire lo que le sucedió a Abram después de que Lot se separó de él (versículo 14), Dios le habló a Abram, le dio una visión profética y luego terminó con instrucciones específicas (versículo 17).
"Después de que Lot se separó de Abram, el Señor le dijo: «Abram, levanta la vista desde el lugar donde estás. Mira hacia el norte y hacia el sur, hacia el este y hacia el oeste. 15 Yo te daré a ti y a tu descendencia, para siempre, toda la tierra que abarca tu mirada. 16 Multiplicaré tu descendencia como el polvo de la tierra. Si alguien puede contar el polvo de la tierra, también podrá contar tus descendientes. 17 ¡Levántate, recorre el país a lo largo y a lo ancho porque a ti te lo daré!”
Ahora, Abram hizo dos cosas importantes después de que el Señor habló que son clave para nuestro 2025. 1) Abraham respondió con obediencia inmediata levantando y moviendo su tienda y 2) dio gracias a Dios por este encuentro construyendo un altar al Señor. Sé que Dios desea encontrarse contigo en esta temporada para compartir contigo Su visión para tu vida y darte instrucciones divinas. Lucas 19:40-44 describe un escenario en el que los enemigos de Jerusalén se apoderaron de la ciudad y de su gente porque Jerusalén no buscó la paz y debido a esto perdió el tiempo de su visitación. No podrás llevar contigo a todos los que están actualmente en tu vida en esta próxima temporada. ¿Cómo sabemos de quién quiere Dios que nos separemos? La respuesta son todos que son estorbos o que te detenga. Estos son los burladores, los pecadores descarados, los que pueden influir negativamente en ti, con los que estás discutiendo o constantemente justificándote a ti mismo o a tu fe. Hebreos 12:1 dice: "Por tanto, también nosotros que estamos rodeados de una nube tan grande de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia y corramos con perseverancia la carrera que tenemos por delante". Cualquier cosa que te quite tu energía, esfuerzo o enfoque de dónde vas, debes eliminarlo. Debes despojarte de cualquier cosa innecesaria que te enrede en el pecado o el desaliento. Esto puede significar que es hora de cerrar la cuenta, eliminar el número, salir del grupo, cortar el compromiso, cancelar la suscripción, eliminar las tentaciones, dejar de seguir o borrar la lista de reproducción. Para algunos, las instrucciones pueden ser incluso más drásticas, puede ser empacar y mudarse, mudarse de ubicaciones geográficas o mudarse de esa casa o situación.
Cuando obedecemos la palabra del Señor y "nos recortamos", escucharemos a Dios, veremos una visión clara de la voluntad de Dios para nuestras vidas y recibiremos instrucciones para llegar a nuestro destino divino. Cuando escuchamos a Dios, de nuevo debemos obedecer inmediatamente y dar gracias al Señor. Debemos asociarnos con Dios de esta manera durante esta temporada y durante todo este año si queremos hacer grandes hazañas para el Reino de Dios. Si sabes que Dios te está llamando a mayores alturas, hay una carrera por delante de nosotros que debemos correr con resistencia, paciencia, persistencia activa y ritmo constante. No podemos hacer esto con nada ni nadie que nos detenga y nos agobie. ¡Mantén tus ojos en el premio, Jesús! Recuerden todo lo que hizo por nosotros y que este "recorte" es lo menos que podemos hacer por él.
Reflexión:
1. ¿Cuáles son las cosas que ponemos delante de Dios?
2. ¿Qué te impide decir "sí" a Dios?

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